Cajita de música

Niños de la Republica Popular de Corea del Norte, 2009

Tras publicar la entrada anterior, nuestros lectores se apresuraron a aclararnos que no solo los líderes de los dos grandes laboratorios del pujante mundo nuevo dedicaron especial atención a los niños, tampoco los padres de las otras patrias dejaban desasistidos a los chavales de sus pueblos.

Mussolini, escribe Effe, subrayó también su compromiso con los niños. I bambini: sono essi la primavera della nostra stirpe, l’aurora della nostra giornata, il segno infallibile della nostra fede. – «Los niños: son ellos la primavera de nuestra estirpe, la aurora de nuestra jornada, la marca infalible de nuestra fe», declaró ya en 1923, en el Gran Consejo de Venecia. A la vez, no dejó demasiadas imágenes —aparte de la foto con su familia, a la izquierda— donde se le viera con niños. Seguramente tenía buenas razones para ello. Como cuenta Jenner Melletti en La Repubblica, basándose en las investigaciones del profesor Umberto Sereni de Udine y de su alumna Eva Dorigo, el futuro Duce, que en 1907 empezaba su carrera como profesor de la escuela elemental de Tolmezzo (Friuli), fue un pésimo profesor. No le importaban los niños, odiaba la enseñanza y era incapaz de mantener el orden. «El señor Benito Mussolini —escribió el inspector de escuela Sardo Marchetti en 1907—, a pesar de que tenemos que reconocer sus esfuerzos, solo ha alcanzado unos resultados muy pobres. Habría sido mucho más fructífero si hubiera dedicado a la escuela una mayor proporción de sus poco comunes habilidades intelectuales».

Julia nos mandó de Argentina la cartilla para la clase secundaria de la escuela primaria, Cajita de música, donde se presenta con toda ternura el amor a los niños del General Juan Domingo Perón. Durante el gobierno de Perón, el 17 de octubre pasó a ser el Día de la Lealtad y del Niño Peronista. Por supuesto, el libro dedica buena parte de su contenido a Evita.




En Hungría ningún dictador, desde Béla Kun, amigo de Lenin en 1919, pasando por el nazi Ferenc Szálasi, de 1944, hasta el comunista János Kádar, de 1957, manifestó una especial voluntad de desarrollar un culto a los niños. No obstante, tuvieron hacia ellos propósitos similares a los de sus colegas del este y del oeste.

Nuestras reservas para las batallas del futuro, sello, 1950

Las batallas del futuro llegaron pronto y estas «reservas» desempeñaron un papel decisivo, aunque no exactamente el que había imaginado el Partido Comunista.

Jóvenes voluntarios luchan en Budapest en la Revolución de 1956

El régimen, disgustado con sus protegidos, ahora dejaba de lado a estas desagradecidas víboras.

Un artículo publicado poco después de sofocada la Revolución de 1956, anunciando la decisión
de los tribunales de Budapest, en el sentido de que los padres no concedieran
ninguna ayuda a los hijos que abandonaran el país

Y en España tampoco faltan algunos documentos espectaculares sobre la relación entre Franco y los niños. Este poema incluido en una cartilla de 1949 deja claro que solo para salvar a los niños Franco saltó desde Marruecos, donde estaba destinado en 1936, a España, sublevando al grueso del ejército contra el yugo de la República y empezando así una cruel Guerra Civil de tres años de duración.

Hallábase Franco un día
en una playa lejana.

Mientras las olas, tranquilas,
muerte en la arena buscaban,
él meditaba proyectos
de incalculable importancia.

Tendía de cuando en cuando
los ojos hacia su Patria.
Una vez se le nublaron
y le nacieron dos lágrimas
al pensar en tantos hijos
de su idolatrada España
que eran inocentes víctimas
de una educación malvada.

¡Pobres niños! –dijo Franco-;
niños hoy, hombres mañana:
¿qué españoles han de ser
si les mancillan el alma
con doctrinas pestilentes
y prácticas depravadas?,
¿si el manantial les cegaron
de divinas enseñanzas
y no hay una Cruz bendita
que dignifique las aulas?,
¿si a una siembra de virtudes
siembra de vicios reemplaza?
Nublan estas ideas
la limpísima mirada
de Franco, mientras las olas
muerte en la arena buscaban…

De súbito alza la frente;
ambos brazos adelanta
como queriendo abrazar
a los niños de su patria
y con acento rotundo
que pone Dios en su alma
dice:-¡No pereceréis,
flores del jardín de España,
lo mejor de su riqueza
su más risueña esperanza
pedazos del corazón
de patria madre abnegada!

Quiere el cielo que yo quiebre
las cadenas con que labran
vuestra eterna desventura
chacales de forma humana
¡Arriba España!, hijos míos,
rosas del jardín de España.

Desde las más altas nubes
una legión de querubes
bajó a llamar la cruzada,
mientras que un ángel guerrero
fulgor quitaba a un lucero
para dárselo a una espada…

Los muy ingratos no debían apreciar mucho los esfuerzos del Generalísimo,
 a juzgar por como dejaron esta imagen de la misma cartilla
(tomada del blog Paralelo Adn)

Otro ejemplo de la conmovedora responsabilidad asumida por Franco hacia los niños —en esta ocasión generosamente hacia todos los niños del mundo— está en este vídeo navideño donde anima a su nieta Carmen a que mande un mensaje «espontáneo» desde España urbi et orbi. Fíjense en cómo mueve el dictador los labios, como un ventrílocuo haciendo hablar a su muñeco.


Pero bromear con estos dictadores puede provocar que la sonrisa se nos hiele en la cara. Hablando de los niños de Franco, y dejando a un lado el aspecto más o menos burlesco, o grotesco, del tema, la democracia española tiene dentro de sí fosas sépticas que solo muy recientemente se han señalado. Poca gente se atrevía a hablar de ellas y son menos aún quienes consideraron que deben limpiarse para equilibrar nuestra maltrecha conciencia colectiva. Es cierto que ha pasado el tiempo desde la Guerra Civil, y que Franco murió de viejo hace mil años, pero hay tanto dolor acumulado en esos lugares donde no queremos mirar, que es imposible ocultarlo. En España casi todos tenemos historias familiares que la oficialidad ha ignorado o que, entre todos, hemos tapado. Es necesario todavía abrir los ojos, desbridar los abscesos, iluminar y exponer nuestra historia claramente. Uno de los lugares más oscuros de la represión tiene que ver con las cárceles y campos de concentración de mujeres y el trato que se dio a los niños familiares de los combatientes republicanos (bastaba con que fueran meros sospechosos… o por cualquier otra razón personal).

Sería bueno que se atendiera más a documentos como estos, elaborados sin afán de venganza, intentando un equilibrio informativo que nunca se tuvo. Hoy se advierte más miedo en quienes albergan algún tipo de mala conciencia que deseo vengativo por parte de los ultrajados.

Vale la pena dedicar un rato a ver el reportaje de abajo, Els nens perduts del franquisme / Los niños perdidos del franquismo. Está dividido en dos partes. Contiene los testimonios directos de los presos, sobre todo mujeres, y de los niños que sobrevivieron a aquellas cárceles donde se torturaba y se fusilaba sin contemplaciones. La figura siniestra del doctor Vallejo-Nájera, psiquiatra del régimen, y sus teorías eugenésicas sobre el marxismo tendrían un punto cómico si no fuera porque su aplicación práctica era macabra. No da risa ninguna este relato de la separación sistemática de los hijos de las encarceladas y el posterior borrado de su identidad, los fusilamientos de las madres al poco de dar a luz, los castigos arbitrarios a mujeres y niños que se preguntaban qué habían hecho de malo, qué pecado familiar desconocido estaban purgando, el niño a quien le revientan la cabeza contra la pared delante de su madre al descubrir que se llama Lenin, el hambre, las enfermedades de esos pabellones de exterminio no declarados… El fondo de estos testimonios da una luz diferente, seguramente más justa, a las imágenes de los dictadores con niños que vimos en una entrada anterior. Y es algo de lo que nunca se habló en España, hasta hace bien poco.




Tampoco es casual que el film esté hecho en Cataluña, interesada en subrayar con más fuerza el castigo recibido en la postguerra, ni, por tanto, que algunos historiadores catalanes, como Ricard Vinyes,  hayan llevado la voz cantante. Podéis ver una entrevista con él en este vídeo de Televisión Española, realizada unos años después del reportaje anterior.


Internet se ha convertido en el lugar donde corre más información sobre estos temas. El trabajo de la Asociación para la recuperación de la memoria histórica ha dado también mayor visibilidad últimamente al problema de la represión franquista, juntamente con el gran alboroto en torno a la figura del juez Baltasar Garzón, que empezó un proceso de recuperación de información sobre las víctimas del franquismo, incluida la apertura de fosas comunes donde todavía yacen los fusilados, tanto conocidos (como Federico García Lorca), como anónimos (decenas de miles cuyos familiares han tenido que callar durante años y años). Ésta del juez Garzón y la memoria histórica es una historia enrevesada, llena de contradicciones y difícil de entender. De momento, la justicia española, a instancias de la extrema derecha (Falange Española), ha conseguido que el juez se vaya de España y que la investigación abierta por él sobre los crímenes del franquismo quede paralizada.

3 comentarios:

Julia dijo...

Muy impresionante el documental sobre los niños perdidos. Los relatos son espeluznantes y sin embargo contados con tal altura y honor que no apelan a golpes bajos. Creí de verdad que no iba a poder verlo, por sensibilidad idiota, y eso no sería bueno porque supongo que lo mejor es que todos puedan enfrentarse a la verdad. Eso es un gran mérito de los realizadores.

Durante muchos años vimos la transición española y su dar vuelta la página del horror de la dictadura franquista como un ejemplo. En los últimos tiempos, cambiamos de opinión. O la matizamos, que siempre es lo mejor. Este darse cuenta hace también que valoremos más el esfuerzo de los juicios a las juntas militares que se llevaron a cabo durante el gobierno de Alfonsín en Argentina con una gran valentía porque todos esos crímenes estaban muy frescos y la amenaza de otro golpe militar era una realidad.

Sólo tengo una crítica para hacer a sobre los documentales, algo que seguramente no gustará a los catalanistas, pero necesito decirlo. Lamento mucho que no pudieran subtitular las partes habladas en catalán o incluso hacer una versión en castellano de esas locuciones, dado que incluso prácticamente todos los entrevistados responden en castellano. Ya sé es algo hecho en Cataluña y que no es tan incomprensible el catalán para los que hablamos castellano, pero me he perdido varias partes lo confieso. Lo mismo les pasará a muchos otros como yo. Es una lástima que dejen afuera por ejemplo a tantos latinoamericanos que no tenemos culpa ninguna por hablar castellano y mucho menos animadversión contra el catalán.

Logan y Lory dijo...

Muy buen artículo que desenmascara a los tiranos que farsantes que gobernaron algún día. Decían sentir amor por los niños, utilizándolos, pero era todo lo contrario, los inocentes eran los que más sufrían sus canalladas. No tiene perdón.
Saludos.

Julia dijo...

Hoy se cumplen 58 años de la muerte de Eva Duarte de Perón, Evita. Durante los gobiernos de Perón las transmisiones radiales se detenían a las 20:25 para recordar "la hora en que Eva Duarte pasó a la inmortalidad".
Como dije en el comentario de la entrada anterior, no se le pueden negar al peronismo las acciones concretas que realizó en favor de los niños argentinos. Se puede discutir el modo paternalista de su caridad, pero en ningún modo olvidar que muchos chicos argentinos tuvieron, por ejemplo, sus primeros regalos navideños gracias a este gobierno y que las mejoras en las escuelas y servicios dedicados a la infancia fueron sustanciales. Creo que nadie pone esto en cuestión, ni siquiera los que provenimos de familias poco afectas al peronismo.
Sólo esto, una breve nota para dejar constancia de este aniversario. ¡Saludos!